¿Sabéis que es lo más complicado de organizar una fiesta de DJ? ¿Qué pensáis que puede ser? ¿Encontrar un buen DJ? El aspecto técnico del evento, la iluminación, el recinto… no, nada de eso. Lo complicado es la seguridad. Cuando mi equipo y yo organizamos el último festival de DJ en Benidorm instalamos un sistema de vídeo vigilancia de cablewindow.com por todo el parking donde se celebraba y gracias a eso nos libramos de más de un problema.
El mundo de la noche invita a consumir estupefacientes y quien diga lo contrario miente. Tú puedes ser de los que no consume pero el caso es que el producto estará a tu alrededor toda la noche, a no ser que los organizadores del evento consigan cortar ese tráfico.
Nosotros somos un grupo de “gente sana” que quiere demostrar que ser DJ, disfrutar la noche y enajenarse con la buena música no es sinónimo de violencia, robos, sexo y drogadicción, al menos no en todos los casos, y por eso creamos nuestra empresa de eventos nocturnos donde la seguridad es primordial en cada acto. Esa noche paramos los pies a, nada más y nada menos, que 14 chavales que pretendían pasar éxtasis y coca y a dos tíos más, estos ya fichados y profesionales del tráfico de drogas.
Pero eso no es todo, también pillamos dos atracos (aunque soy consciente de que hubieron más robos esa noche pero no podemos controlar todo, desgraciadamente.
Todo esto, lo único que consigue es denigrar el mundo de la noche porque sí, es verdad que se mueve mucha droga y también es verdad que, según donde te metas o lo acompañado/a que vayas, puede ser muy peligrosa, pero también es verdad que hay gente que sale a divertirse, que bebé dos o tres copas y se lo pasa bomba, y no pretende hacer daño a nadie. Para esos es para los que yo quiero pinchar mi música, y por eso estamos luchando.
Unas buenas fiestas
Una de las mejores fiestas a las que he ido en estos últimos meses fue en las fiestas patronales de La Nucía adonde vinieron algunos reyes de la noche como DJ Rafa Arenas, “El arrebato”, “Carlos Baute” y otros artistas. No hubieron graves incidentes y aunque sí sé que se pasaron estupefacientes entre los asistentes (eso es muy complicado de evitar aunque lo intentes como hacemos nosotros) también es verdad que no hubo “la movida” que suele haber en este tipo de fiestas donde la gente, a altas horas de la madrugada, ya va desfasada y no tiene ni idea de lo que hace.
Personalmente me gustaría que los Ayuntamientos se unieran a los organizadores de los eventos para aunar fuerzas y cubrir, más o menos, todo el terreno con la seguridad porque me jode mucho escuchas a la población hablando por la calle de lo peligroso que es vivir la noche, y ver noticias y reportajes sobre la fiesta donde los críos de 14 y 15 años van vomitando por las esquinas mientras sus colegas siguen metiéndose de todo “para estar on fire”, pero me tengo que callar… ¿sabéis por qué? Porque es verdad. No mienten. Todo eso existe y somos muy pocos los que, desde las organizaciones, intentamos cambiarlo.
¿Te apuntas a vivir la noche lejos de, lo que yo llamo, “inhibidores de conciencia”?
