La llegada del calor marca el inicio de la temporada de festivales, que sin duda muchísima gente espera año tras año. España es un país que en la última década ha desarrollado un gran afán por los festivales de música, entre los que se encuentran festivales reconocidos mundialmente, como el FIB (Festival Internacional de Benicàssim).
Los festivales de música son una experiencia religiosa para los fans de la música, y da igual el género, ya que hay festivales para todos los gustos. De hecho en cada festival se intenta traer a artistas que interpretan diferentes tipos de música, y los dividen en festivales para intentar abarcar el máximo número de asistentes posibles.
Ir a un festival suena genial, pero si eres primerizo puedes encontrarte en problemas, ya que a veces las zonas de camping parecen un campo de la Primera Guerra Mundial, en el que es imposible encontrar tu tienda. Además, si nunca has ido a un festival siempre tienes el peligro de pecar de novato al subestimar la ingesta de agua, la hidratación es tu máximo objetivo.
Con el fin de que esto no ocurra a nuestros lectores, hoy os ofrecemos unos cuantos consejos para evitar que la asistencia a un festival de música sea una experiencia negativa. Además, no hay que olvidar que el principal objetivo es disfrutar de la música, conocer nuevos amigos y sobre todo llevarse unas buenas memorias.
Consejos para que todo salga sobre ruedas
Asegúrate de que tienes toda la documentación necesaria antes de salir de casa. Hoy en día, acceder al recinto de un festival puede ser tan complicado como coger un avión. Las medidas de seguridad se han incrementado tanto, especialmente en festivales grandes, tanto que si te falta algún papel o documento, puedes quedarte sin entrar. Esto es especialmente duro cuando el recinto en sí está lejos del centro o de la ciudad, como es muy común, ya que entre que haces el viaje de ida y vuelta para ir a buscar la entrada o el DNI olvidados, te puedes perder varios conciertos.
En segundo lugar, aprovisiónate de cosas pequeñas. Cualquier cosa que pese poco y quepa en tu bolso o mochila es susceptible de ser super útil. Puede parecer algo tonto, pero no te puedes imaginar hasta qué punto te sentirás agradecido de haber llevado mini toallitas húmedas, mini kit de higiene dental o mini gel antibacteriano contigo.
En tercer lugar, comprueba que tu tienda es resistente. Compensa gastar un poco más de dinero en una buena tienda que sufrir el infierno de dormir en una inundada o rota. Llévate también una linterna para poder encontrar tu “hogar” cuando vuelvas por la noche, y un antifaz para ganar unas horitas de sueño por la mañana. Te recomendamos tiendas que no dejen pasar la luz solar para no pasar calor por las mañanas.
Llévate ropa de verano y de entretiempo. El tiempo en esta época del año, y sobre todo en nuestro país, puede ser muy variable, así que prepárate para cualquier escenario. Llévate ropa fresquita, ya que, si hace calor, hará el triple de calor en el recinto. Por supuesto, no olvides tampoco prendas más adecuadas para el frío, ya que las temperaturas bajarán por la noche, e incluso puede llegar a llover
No olvides que el dinero si que es importante. Lleva dinero en efectivo, incluso un poco más del que tengas pensado gastar. Nunca se sabe si vas a necesitar coger un taxi, comprar comida o si de pronto sentirás un súbito capricho de arrasar con los stands de merchandising de los grupos. En los grandes festivales suelen tener cajeros dentro del recinto, pero cuenta con una larguísima cola delante de cada uno de ellos.
Relacionado con el punto anterior, lleva comida en tu mochila. Puedes llevar cosas pequeñas, o también puedes llevar dinero presupuestado para comidas. De hecho suelen haber puestos de comida, por ejemplo, en Alicante hay un festival universitario en el que se hace una paella gigante. Rossini Catering es una empresa madrileña dedicada exclusivamente a las paellas gigantes y a las comidas populares, especializada en ofrecer sus servicios para grandes y pequeños eventos, en los que cobre importancia el sabor de los guisos y arroces de cocina tradicional.
Por último, protege tus tímpanos. Puede sonar absurdo o contraproducente el usar tapones para los oídos cuando vas a ver un concierto, pero lo cierto es que escucharás la música más nítidamente, incluso los graves se sentirán mejor. Lo mejor de todo es que no estarás sordo a la mañana siguiente.