El emprendimiento es actualmente una salida que se plantea ante las pocas perspectivas de calidad que existen actualmente. Después de estar unos buenos meses que terminaron alargándose a año y pico en la cola del paro, decidí tomar el toro por los cuernos y montar mi propio negocio con un buen socio y amigo.
La música territorio para emprender
Aunque venimos de sectores tan alejados de la música como el financiero, realmente nuestra pasión era esa. Contábamos con un local grande perteneciente a mi amigo que le correspondió como herencia de su abuelo y nuestra idea era convertirlo en un estudio de grabación y un local de ensayo con 5 cuartos para bandas que busquen ensayar, así como una pequeña sala de conciertos para que los más atrevidos pudieran mostrar su arte a los amigos.
Pudimos contar con el dinero necesario, con dinero ahorrado, pero la mayor parte gracias a un préstamo que pudimos hacer y que casi salió de milagro. Mucha ilusión, pero también responsabilidad.
Desde el primer momento tuvimos claro que no íbamos a escatimar en calidades y que estaríamos equipados lo mejor posible. Queríamos unas instalaciones realmente modélicas que fueran referencia en nuestra ciudad de mediano tamaño.
Estaba todo previsto menos algo que era bastante importante, la publicidad. Todo negocio que comienza debe hacerse conocer, montamos una página web con ayuda de un colega programador que nos echó una mano y así conseguimos ahorrarnos un buen dinero, pero necesitábamos publicidad de la vieja escuela para repartir en otros centros y en lugares de conciertos de la ciudad.
De nada sirve que te lo curres mucho en montar tu negocio cuando no te conoce nadie, por lo que recurrimos a Publiexpress que desde el primer momento se volcaron con nuestro proyecto y nos montaron todo de tal manera que incluso ellos mismos se dedicaron a repartirlo por las zonas que queríamos.
El resultado podemos decir que ha sido un éxito, en los 4 meses desde la inauguración hemos podido ver como el negocio va sobre ruedas, aunque tardaremos algo más de previsto en recuperar la inversión, pero contamos con un lleno en todos nuestros servicios e incluso lista de espera en caso de que se caigas bandas que bien quieren grabar o ensayar.
Sabíamos que, en nuestra ciudad, de clima durillo, podía salir bien, máxime cuando habíamos detectado una falta de locales de ensayo bastante grande. Estamos intentando en estos meses unir nuestras fuerzas con las de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento para que nos echen una manilla. La cultura es necesaria y todos sabemos que la música puede suponer una vía de escape y de arte para la juventud.
Lo mejor es ver a esos chavales con 18, 20, 30 o hasta una banda de cincuentones que tenemos, ensayando con ilusión. El que vengan miembros de las bandas y nos agradezcan el servicio y las instalaciones que damos a unos precios razonables nos llena de alegría, ya que es reconocimiento a la sensibilidad y al trabajo bien hecho.
Mi recomendación a todos los que amáis la música y tenéis intención de montar algo en este sector tan bonito, pero a la vez tan duro, es que intentéis aportar algo diferente, pero que tenga realmente salida. Hay que detectar las necesidades y una vez ahí saber que puedes ofrecer y apostar totalmente por ello. La confianza es básica, pero también hay que ser realistas y no luchar contra una empresa que lleve muchos años establecida o modelos desgastados.
De una manera más concreta, debemos ilusionarnos y poner en marcha nuestros proyectos, pero con los pies en el suelo y recordando que la viabilidad del proyecto es fundamental para que pueda alcanzarse el éxito. Luego tenemos la lucha diaria con los gastos inesperados u ocasiones o ese tema que pensabas que iba a ser de una manera y luego es de otra.
Así que ya sabes, espero que mi experiencia te haya sido de utilidad y puedes usarla para beneficio de las ideas que tengas o de las de familiares o amigos. Al final la recompensa te la dan tus clientes, que son los que hacen que la fama de trabajadores profesionales se vaya expandiendo y sea tu mejor carta de presentación. ¡Suerte!